En noviembre de 1929, Rodrigo regresa a París, después de pasar una temporada en España, y se encuentra sin casa pues su amigo, el pintor Francisco Povo, había decidido marcharse a Barcelona y alquilar la casa donde había vivido Joaquín. En pocos días, encuentra la que sería su segunda residencia en París.
«Previo descanso del feliz viaje, hubo de ver la trapatiesta, la barahúnda y batahola que armé yo en París en 48 horas. Teléfono a los amigos, cartas, visitas, anuncios en los periódicos, autobuses, tranvías, metros, taxis, todo en movimiento, y medio París movilizado en busca de una casa para el tío Chimo y, créame Chávarri, se está poniendo París de un modo que es realmente un problema encontrar algo decente cuando se ha de contar con un magro presupuesto. Pero aquí está el tío de la suerte que es un servidor y a los seis días justos de las pesquisas, de la manera más boba y más inesperada, que es como siempre se encuentran las cosas, he encontrado un mirlo blanco, es decir un pequeña «garçonniére», muy pequeña (…) ¿Hay algo más?, pues sí señor, hay algo más: y es que esta su casa se encuentra en la rue de Passy, que como Vd. ya sabe, es el barrio chic, a dos pasos del Bosque de Bolonia, pero a 16.000 Kilómetros de la rue du Chateau d’eau.
Carta de Joaquín Rodrigo a Eduardo López-Chávarri, 30 de noviembre de 1929
https://paris.cervantes.es/
7, Rue Quentin Bauchart
75008 París
Francia
Tel.: +33 1 40 70 92 92
Fax: +33 1 47 20 27 49
cenpar@cervantes.es
