Pyla-sur Mer es un pueblecito costero apacible que se sitúa cerca de Arcachon, a unos 50 kilómetros de Burdeos. Fue el lugar que eligió don Manuel Azaña, ex Presidente de la República Española para exiliarse, diciendo: “No pienso que Franco vaya a buscarnos a Burdeos”. Ya muy enfermo del corazón, Manuel Azaña permaneció en Pyla desde noviembre de 1939 hasta junio de 1940, la invasión alemana y su huída hasta Montauban el 25 de junio donde falleció a los pocos meses el 4 de noviembre de 1940.
Durante su amarga estancia en la más villa L’Eden, el ex Presidente en el exilio se dedicó sobre todo a leer, a organizar una biblioteca y a recibir escasas visitas, entre las cuales las de Miguel Maura, Claudio Sánchez Albornoz y Juan Negrín.
“El Edén”, que así se titulaba la villa, con nombre harto paradisíaco que el ex Presidente rechazaba, se nos ofrecía como el más digno y placentero refugio de cuantos hasta entonces habíamos visto a tal propósito.” Cipriano Rivas Cherif, Retrato de un desconocido: vida de Manuel Azaña, Grijalbo, 1980, p. 462.