El 13 de mayo de 1959 Arts publica el texto del discurso que Dalí no pudo pronunciar el 5 de mayo en la tribuna del Bal des Petits Lits Blancs, en el Palais des Nations de París, debido a un exceso de público y a la accidentada organización.
«Había aceptado participar como atracción en el «Bal des Petits Lits Blancs» porque quería leer un mensaje que se resume en una simple frase de san Agustín. Pero la mala organización del espectáculo ha hecho que los espectadores se volviesen más dalinianos que Dalí, y su delirio ha superado los míos. Ha sido uno de los grandes momentos de mi vida»
Ensayos 1 Vol. 4, Página 700