Algunos de los lugares míticos que le acompañan en sus estancias en París son el Hotel Meurice,restaurantes como Maximâs, Lasserre, Le Doyen, La Tour dâArgent o Franc Pinot y lugares singulares, pero de gran importancia, como la tienda Sennelier, en la rive gauche.
En la principal sucursal de Sennelier, en el muelle enfrente del Louvre, el artista se abastece de lo necesario para pintar: telas, colores y sobre todo los pinceles de abanico de pelo de marta que tanto usa para sus veladuras, o los medium a base de resina de ámbar.
Montse Aguer