Carpentier también frecuentaba al mismo tiempo otro grupo, diferente del surrealista (…) Cronistas que mantenían comunicación con un público hispanoamericano que se interesaba por París y por las actividades culturales de esa ciudad. Enviaban a sus respectivos periódicos y revistas notas sobre los últimos estrenos, la vida literaria, la vida artística y social en general. Así lo fueron Enrique Gómez Carrillo, Antonio de Vedia y Mitre, Alfonso Reyes, León Pacheco, Toño Salazar, Eduardo Aviles Ramírez, Mariano Brull, Miguel Angel Asturias y muchos otros más, incluyendo al propio Carpentier.
A partir de abril de 1928, Carpentier comenzó a enviar crónicas a dos revistas de La Habana; Social, tan importante para el grupo minorista, y Carteles. A partir de ese mismo mes de abril comenzó a trabajar para «La gaceta musical», revista en español publicada en París y dirigida por el mexicano Manuel M.Ponce que se distribuía tanto en América Latina como en Europa. Para «La gaceta musical» Carpentier redactó numerosas reseñas: sobre Debussy, sobre Stravinsky, sobre Villa Lobos.
Alejo Carpentier y París, de Carmen Vásquez