Zona donde se encuentra el taller del pintor del Club, Etienne.
«A esa hora Etienne debía estar pintando y le reventaba que le telefonearan en mitad del trabajo pero lo mismo tenía que llamarlo. El teléfono empezó a sonar del otro lado, en un taller cerca de la place d’Italie, a cuatro kilómetros de la oficina de correos de la rue Danton».
«En torno a Étienne y Oliveira había como un círculo de tiza».
Rayuela (capítulo 100)