Junto a la actual Biblioteca Histórica estaba la prisión en la que coincidieron y trabaron amistad Teresa Cabarrús y Josephine de Beauharnais, futura esposa de Napoleón. Para evitar la muerte de Teresa, que le reprochaba su pasividad, su amante Tallien encabezó el golpe contra Robespierre el 26 de julio de 1794.
«Mañana debo comparecer ante el tribunal, esto es, subir al cadalso. Esta noche tuve un sueño: Robespierre había dejado de existir y las puertas de las prisiones estaban abiertas. Gracias a vuestra abyecta cobardía pronto no habrá nadie en Francia capaz de realizarlo».
Carta de Teresa Cabarrús a Tallien, 24 de julio de 1794